domingo, 25 de marzo de 2012

Dicen que la primavera, la sangre altera. Os aseguro que durante estos días, mi presión sanguínea ha estado sometida a mucha. Cuando pienso que he llegado al tope de experiencias y energías, vienen nuevas historias mucho mejores que las anteriores.
Para aquellos que estáis un poco perdidos, durante mis vacaciones de Semana Santa, que fueron la semana pasada, me puse de nuevo en la carretera buscando temperaturas más cálidas, es decir, sur. Florida fue el destino elegido. De nuevo, me acompañaba Doriane y esta vez, se unieron Josh, mi vecino aquí en Dayton y su chica, Nicole.
Lo mejor de esta primera parte del viaje, fue conocer a la tía de Josh, Lee, una señora que nos acogió en su casa la primera noche y que fue un primor. Nos llevó a cenar a su restaurante favorito, nos contó su vida: que si era una mujer del campo, que le maravillaban "las culturas", que sus hijos le acababan de regalar por su cumpleaños un pasaporte y por fin podría viajar sin parar por todo el mundo, que los productos orgánicos eran una maravilla y que todos debíamos consumir productos orgánicos... la señora no callaba, pero daba gusto escucharla. Lee era una funcionaria que en su tiempo libre de dedicaba a los kiromasajes. Yo tuve la tremenda suerte de dormir en la habitación donde atiende a sus clientes. Allí estaba yo, delande la camilla que utiliza, con una sábana encima y rodeada de figuritas de budas, inciensos, símbolos del Yin-Yan... "Espero que no te muevas mucho mientras duermes"- me dijo mientras se partía de la risa.
Al día siguiente nos preparó pancakes y tiramos para Atlanta, en el estado de Georgia. Atlanta os sonará a algunos por los juegos olímpicos de 1996. Además de eso, tiene un aeropuerto escala de vuelos domésticos, un acuario relativamente conocido y lo que la hace más conocido es la fábrica de Coca-Cola. Aquí fue donde en 1886, el farmacéutico John Pemberton inventó el refresco, que en un principio fue un medicamento y luego se convertiría en la bebida más famosa. Visitamos el museo, que ya de paso, NO recomiendo porque es bastante decepcionante y nos pusimos de camino a Pompono Beach, nuestra siguiente parada. 

1 comentario:

  1. :)
    Ay, que no te había leído ^^
    Qué maravillosos tus viajes, ju! Sigue contando que sé que todavía queda una gran parte, incluyendo tu cumpleaños =)
    Mil besos cordobeses,
    Pupe

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